Garrapiñar - Bañar golosinas en el almíbar que forma grumos. Endulzar.
Garrapiñar es endulzar, es saborear cosas bonitas, es disfrutar de placeres pequeños y naturales. Eso es precisamente lo que os proponemos hoy. Se trata de una sencillísima dinámica que utilizamos en clase, en los talleres, en alguna charla y, por supuesto, en nuestra casa.
Lamentablemente ni nosotros ni los más pequeños estamos acostumbrados a decir cosas bonitas y sinceras a quienes tenemos cerca. Tampoco a oírlas. Sin embargo, los defectos y las críticas fluyen de forma constante. Nuestro objetivo es reequilibrar y educarnos en el halago y en la crítica positiva.
¿Cómo lo hacemos?
Sea en clase o en casa, garrapiñar consiste en establecer un determinado orden o sentido, por ejemplo, sería muy sencillo en el sentido horario de un círculo o estableciendo un orden por filas y columnas en el aula.
Una vez definido esto, la primera persona dirá algo positivo al siguiente compañero. Éste segundo al tercero. El tercero a el cuarto y así sucesivamente hasta completar los participantes.
Normas básicas (pocas pero muy importantes).
- Cada persona solo dice un aspecto positivo a la persona siguiente.
- Lo que diga tiene que ser siempre POSITIVO, HONESTO y PROPORCIONADO.
- Valen aspectos físicos, pero a ser posible serán personales, sociales o acerca de sus talentos.
- Tanto el que garrapiña como el garrapiñado miran a los ojos de la otra persona.
- Una vez recibido el garrapiñe, la persona garrapiñada da las gracias.
- Cualquier persona que no valore lo importante de su garrapiñe, simplemente no recibe el suyo y pierde la oportunidad de garrapiñar en la siguiente ronda. Nada más. Se pasa a la siguiente persona.
Algunos consejos
- Haz doble ronda, simplemente cambiando el sentido o las posiciones.
- Las primeras veces cuesta, especialmente entre adultos. Se paciente, es muy importante educar en el ofrecimiento pero también en la recepción de halagos.
- Prueba a hacerlo en casa o con tus amigos. Es sorprendente como reaccionamos y lo bien que te sientes después de los nervios iniciales. Además, es muy posible que redescubras cosas que pensabas olvidadas o aspectos increíbles de quienes tienes cerca.
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